En San Juan Lalana, Oaxaca, una iglesia evangélica ubicada en Cerro Cajón fue consumida por un incendio este martes, en un incidente que también incluyó saqueos y actos de vandalismo.
La congregación cristiana afectada acusó a la autoridad municipal de San Isidro Arenal de haber perpetrado el ataque, en represalia por la negativa de la comunidad a colaborar financieramente con una fiesta patronal.
Los miembros de la iglesia sostienen también, que la negativa de la autoridad local a permitir la construcción del templo y la casa de oración se debió a la preeminencia del catolicismo en la región.
El secretario de Gobierno, Jesús Romero, indicó que en Oaxaca existen actualmente 27 conflictos religiosos, con 14 en activo y en proceso de resolución. Entre los casos mencionados están el conflicto en Cerro Cajón.
Y otros en San Juan Yaee, San Juan Yatzona, y San Andrés Solaga, así como disputas en las regiones de Valles Centrales y la ciudad de Oaxaca.
Porfirio Flores Zúñiga, representante legal de la Cofraternidad de Pastores de Oaxaca, condenó la violencia y destacó que la quema de templos y la persecución de creyentes reflejan una preocupante falta de tolerancia religiosa en la región.
En un mensaje publicado en Facebook, la Iglesia Cristiana Region Chinanteca de la Iciar también denunció la destrucción de su templo, el saqueo de pertenencias y el daño a la propiedad agrícola de la congregación.
Flores Zúñiga advirtió sobre el riesgo de que la violencia religiosa escale aún más si no se toman medidas efectivas para proteger a las comunidades de fe diversa.