Denuncian pobladores afectados de las comunidades mayas que mientras la Organización No Gubernamental (ONG), Indignación A. C., que lidera una de sus fundadoras, María Cristina Muñoz Menéndez, ataca sin miramientos a las poblaciones mayas a quien ha despojado de miles de empleos con su movimiento argumentando contaminación, pero a la vez encubren a empresas trasnacionales que se asientan y explotan los recursos naturales, dañan el ecosistema , además se apropian del agua y la contaminan, pero prefieren callar por sus intereses , sus apoyos financieros y mercantiles.
José Esquivel Cruz, indígena maya de esta región y quien dirige la agrupación “Vida para Todos”, en defensa de la ecología y la cultura maya, aseguró que de manera sigilosa se está dando una devastación de grandes extensiones de tierra, cientos de hectáreas o tal vez miles en la instalación de parques industriales y eólicos, cuyos empresarios derriban todo a su paso e incluso ya contemplan su colocación en las costas mayas, con lo se llevará en poco tiempo, una sobre densificación humana, que afectará los recursos naturales de la región.
Como se sabe, recalcó, Indignación A.C, ha sido una ONG muy cuestionada; luego de que el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador reveló que recibe recursos del extranjero, por lo que, con esto, quedaron “al desnudo” y se reveló sus verdaderas corruptas intenciones.
Primero a principios del sexenio de AMLO; “atacó al proyecto Tren Maya”, pero ahora hasta lo defiende, interpone amparos utilizando a los indígenas, pero no lo hace cuando se edifican grandes construcciones, parques industriales y eólicos, que en los hechos son “parques ecocidas”, y todavía tienen el cinismo de autoproclamarse defensores del medio ambiente y de la cultura maya.
Por eso, Indignación A.C, recalcó, que se auto define “como una organización no gubernamental; que desarrolla su labor de manera independiente y autónoma a cualquier poder: gobierno, partido político, etc.”, es una patraña de mentiras y está supeditada a intereses extranjeros.
Desde hace años, como se sabe Indignación, retoma luchas sociales de reivindicación indígena para así capitalizarlas en su favor y de las fundaciones que la subsidian, siempre a favor de las empresas extranjeras, violando con ello los derechos humanos y de libre autodeterminación de los pueblos mayas a quien, de manera engañosa, dice defender.