Cerca de las 6:30 de la mañana del 26 de junio de 2020, el exmando capitalino, Omar García Harfuch, sufrió un atentado sin precedentes en la Ciudad de México. Más de 400 balas de diferentes calibres fueron vaciadas en contra del convoy en que se trasladaba en inmediaciones de Paseo de la Reforma, en la colonia Lomas de Chapultepec.
En aproximadamente 180 segundos, una veintena de sicarios dispararon 414 veces sus fusiles de asalto, Barret, lanzagranadas y bombas de fragmentación con el objetivo de matarlo.
Como resultado del ataque fallecieron tres personas, dos de ellas amigos y escoltas del extitular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC). Una mujer llamada Gabriela, de 26 años, también murió en la emboscada.
Casi tres horas después del inesperado e insólito atentado, García Harfuch daba cuentas en Twitter (hoy X). El Cártel Jalisco Nueva Generación y su líder, Nemesio Oseguera “El Mencho”, fueron responsabilizados.
Hoy tres años después, el exmando policiaco se lanza para contender por el gobierno la Ciudad de México, urbe asolada por células criminales cuya peligrosidad, violencia y barbarie les han conferido un nombre en los anales de la delincuencia.
Ascendencia revolucionaria
Omar García Harfuch, de 41 años, es nieto del general Marcelino García Barragán, revolucionario que peleó en los contingentes de de Francisco Villa. Fue Gobernador de Jalisco en los años cuarenta y fue secretario de la Defensa Nacional durante el Gobierno de Díaz Ordaz (1964-1970).
Su padre fue Javier García Paniagua expresidente del PRI y extitular de la Dirección Federal de Seguridad (DFS), cuyo nombre está ligado a la matanza de Tlatelolco el 2 de octubre de 1968.
Su madre es la actriz María Harfuch Hidalgo, cuyo nombre artístico es María Sorté, uno de los rostros más conocidos del cine y la televisión en México.
Es licenciado en Derecho por la Universidad Continental y licenciado en Seguridad Pública por la Universidad del Valle de México (UVM).
Durante su estancia al frente de la SSC-CDMX dio fuertes golpes a bandas delincuenciales como La Unión de Tepito, el grupo Anti Unión, el Cártel de Tláhuac y el Cártel de Sinaloa, entre otros.
Se cree que los embates contra estás células y sus líderes derivó en el ataque de junio de 2020 en su contra.
Claroscuros
No todo son triunfos y flores para el exmando. Su nombre también se ha visto comprometido. En especial luego de que apareciera en la libreta de Sidronio Casarrubias, líder de Guerreros Unidos, el grupo vinculado a la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Aquí se mencionaba que había recibido al menos 200 mil dólares de parte del narco.
Investigaciones que citan documentos de la Secretaría de la Defensa sitúan a Omar García Harfuch en Iguala (Guerrero) el 7 y 8 de octubre de 2014, en las primeras reuniones entre autoridades federales y estatales por el llamado caso Ayotzinapa.
En ese entonces ocupaba un puesto de comisario en la división de Gendarmería de la Policía Federal. Ante esto, ha repetido en varias ocasiones que para cuando ocurrió el ataque contra los estudiantes normalistas, él había dejado Guerrero y ya se encontraba en Michoacán.
“De todas las cosas que se han dicho, lo de Ayotzinapa es lo que más me duele. No solo es algo disparatado e injusto, sino que es uno de los episodios más dolorosos de la historia reciente de México”, refirió en una entrevista con El País.
Por su parte, la periodista Anabel Hernández le acusó de haber tenido contacto con García Luna a quién envió varias cartas. Al respecto, García Harfuch ha dicho que solo lo vio una vez en un aeropuerto y esa fue toda su relación, negando cualquier intercambio de misivas.
“En mi vida he escrito una carta, ni a mi madre”, contestó también al diario español por toda respuesta.